Sin dudas este país me asombró completamente ¡y ni hablar de todas las curiosidades de Holanda! No tenía pensado quedarme tanto tiempo ni que me iba a gustar tanto. Como te habrás dado cuenta en el post Descubriendo el Sur de Holanda quedé encantada con este país.
Curiosidades de Holanda
Así que más allá de sus castillos, sus hermosos canales, la paz que se respira al sur, sus tantísimas diferencias entre ciudad y ciudad, estas son las maravillosas cosas que descubrí por mi paso por los Países Bajos.
¿Y las sábanas dónde están?
Sí, aunque usted no lo crea, me tomó un tiempo entender el temita de las sábanas. Al menos en mi país, está el cubre colchón, la sábana para taparte, el cubre almohadas, y el acolchado o frazada…fin. Acá es algo muy extraño, porque si te comprás un juego de sábanas, solo viene una especie de funda para el acolchado, es decir que lo envuelve, pero que a su vez es sábana.
Así que estuve unos cuantos días, pensando que me faltaba la sábana, hasta que me dijeron cómo era el sistema. Lo que sí, después de dos semanas en el país, aún no sé cómo hacer para no destaparme en medio de la noche ni amanecer con la cama medianamente tendida.
Los buses tienen horario (y se cumplen)
Olvidate de llegar tarde al trabajo poniendo la excusa de se me atrasó el colectivo. Increíblemente, además de tener los horarios de cada hora, cada día de la semana, en muchas paradas tenés una especie de relojito al estilo aeropuerto que te dice en cuántos minutos viene el colectivo. ¡De locos!
Igualito, igualito al colectivo argentino. Tan igual que cuando vemos que los buses cumplen los horarios lo nombramos en un post de curiosidades de Holanda.
Basura por aquí, basura por allá
Nunca ví tanto reciclaje de la basura, así que me volví loca pensando en cuál de los 7 tachos de basura tenía que tirar cada cosa. Se separan:
- Cartones, tetrabrick y latas
- Vidrios
- Plásticos
- Verde (todo lo que le pondrías al compost)
- Ropa
- Bombillas de luz
- Todo lo que no entra en la lista, recién se tira en la basura.
Plus de curiosidades de Holanda: la gente tiene que pagar su basura, por kilo. O sea que cuanto más reciclan, menos tienen que pagar.
Shops online a la enésima potencia
Aunque con el covid esto ya no nos parece tan extraordinario, pero antes del boom online en nuestros países sí. En Holanda, todo lo que quieras comprar podés hacerlo desde tu sillón. Y cuando digo todo es todo, hasta las cosas más impensables. Luego te lo llevan a tu casa, el día y horario que vos elijas, con lo cual, podés vivir tranquilamente sin salir de tu casa.
Quesos, quesos y más quesos
Si hay algo que voy a extrañar con todo mi ser son los quesos. No importa en qué ciudad estés, siempre encontrarás muchos comercios que venden quesos, muchos muchos quesos.
Desde ya que tenés los clásicos, pero la posta es probar los quesos locos; de leche de vaca, de cabra, de oveja, multicolores, negros, azules, ahumados, ahumados con picante y saborizados con diferentes pestos y hasta con lavanda ( sí, sí, lavanda, la planta).
Hay varias empresas que fabrican quesos, sin embargo encontrarás los locales de Henri Willig en varias de las grandes ciudades
Liquorice al cubo
Son las gomitas negras que hay de mil millones de sabores diferentes (¡Alerta! Exageración argenta a la vista). Bueno, no sé si tanto como mil millones de sabores pero sí hay varían en dureza y si son dulces o salados. Así que si probaste uno y no te gustó, es porque no encontraste tu indicado.
En Amsterdam había probado unos que me resultaron incomibles. Así que les huí durante un montón, hasta que en Mheer probé unos totalmente diferentes. La base es la misma, porque viene del mismo tronquito, pero había una diferencia abismal.
Dicen los que saben, que hay que comerlos con cuidado porque suelen subir la presión. Así que si sos como yo, de los que están caminando mucho y de repente tienen que parar a clavarse unas papas fritas porque les bajó la presión, acá tenemos otra opción para esos momentos.
Sin dudas las gomitas de liquorice están compitiendo más para un post de las comidas más ricas del mundo que para curiosidades de Holanda.
La bicicleta es una extensión corporal
Son pocas las personas que no utilizan la bici en el país. Es tan importante, que es casi un hito del desarrollo. Los holandeses saben cuándo comenzaron a caminar, cuándo dijeron su primer palabra, cuándo tuvieron su primera bici, cuándo le sacaron las rueditas de atrás y cuándo fue la primera vez que llevaron a alguien atrás en la bici.
Con razón en Amsterdam hay más bicis que personas. Ni hablar que hay carriles específicos. Lo malo como peatón es que tenés que mirar que no venga un auto, no venga un tranvía y no venga una bici, todo en carriles separados.
Comer y caminar
No sé a ustedes, pero a mí me resulta súper extraño ver a la gente almorzando mientras camina por la calle…¿no paran un segundo para comer? Parece que no. Es súper común ver a la gente charlando con otros mientras comen y caminan en la hora del almuerzo.
Cuando pregunté acerca de por qué pasaba esto, me comentaron que como tienen poco tiempo de almuerzo en el trabajo prefieren ir a comprarse algo y comerlo caminando mientras vuelven al trabajo, para aprovechar el tiempo de almuerzo haciendo otras cosas. En fin, parece que en Holanda no se llevan el tupper con las sobras de la noche anterior.
El trabajo aburrido es más divertido con amigos
Quería compartirles esto que me lo contaron y me pareció súper lindo. Es muy común en Holanda que para las tareas pesadas vengan amigos a ayudarte para que no lo hagas solo: mudanzas, arreglos en la casa, este tipo de cosas. Y no es algo que se pide, sino que surge espontáneamente de tus amigos…es como algo establecido socialmente que es así.
Estas son las cosas que más locas que aprendí de Holanda. Tengo algunos otroas escritos acerca de este país así que si estás planeando tu viaje por estos lados, te dejo un artículo de todo lo que podés hacer gratis en Delft y también Descubriendo el Sur de Holanda
¿Y ustedes, descubrieron alguna otra? Contáselo a otros viajeros en la parte de comentarios
Algunos de los enlaces del post forman parte de programas de afiliación, es decir que si comprás a partir de estos links Matecito Viajero recibe una pequeña comisión que se destina a los gastos mensuales de manutención del blog.